En los últimos años han sido muchos los que me han preguntado, ya sea en consulta o en formación, sobre herramientas para aumentar su fuerza de voluntad o su autocontrol frente a diferentes situaciones (drogras, alimentación, relaciones personales…), hábitos, etc. La mayoría de ellas coinciden en querer obtener resultados diferentes sin dejar de hacer lo que les lleva una y otra vez a “caer en la tentación”, esperando que algo (o alguien) les de una herramienta mágica para cambiarlo, y así poder llevar la misma vida, pero sabiendo decir NO y “aguantarse”.
Mucho me temo que ni existen las “varitas mágicas”, ni aguantarse nos permite aumentar nuestro autocontrol (al menos no a largo plazo y de una forma adaptativa), por eso creo que el siguiente artículo es realmente interesante y expone de forma sencilla que la fuerza de voluntad, al igual que tantas cosas, se trabaja y se desarrolla, no aparece de pronto el día menos pensado.